
El Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) reveló que el 65% del departamento ya cuenta con algún desarrollo agropecuario. Sin embargo, solo el 17% tiene suelos con la capacidad para dicha actividad.
Por su ubicación geográfica, la economía del departamento de Caldas es una de las más diversas del país, razón por la cual ha logrado consolidar actividades como el comercio, transporte, comunicaciones, turismo y la agropecuaria.
Esta última es por la que más es conocida la tierra caldense, principalmente por los cultivos de café en todo su territorio y la ganadería en el Valle del río Magdalena. Además de estos dos frentes, el sector agropecuario también se ha visto fortalecido por el plátano, macadamia, caña de azúcar, aguacate, remolacha y zoya.
Sin embargo, sus suelos indican que los cultivos y la actividad pecuaria, ya han colonizado terrenos que deberían ser intocables.
Según el Instituto Geográfico Agustín Codazzi, actualmente el 65,7% de Caldas está conformado por tierras arables para el uso agropecuario, cuando solo el 17,7% cuenta con suelos aptos para tal fin.
Río Sucio, Supia, La Merced, Fidalelfia, Neira, Manizales, Viterbo, San José, Risaralda, Villamaría, Aguadas, Norcasia, La Dorada y Victoria, son los municipios con mayor cantidad de área apta para el desarrollo agropecuario.
Pero esto solo se da en el papel, ya que sus 27 municipios presentan algún desarrollo productivo.
Este uso desmedido se ve reflejado en la afectación de ecosistemas estratégicos y zonas que deberían estar protegidas. La entidad reveló que el 80,8% de este territorio, es su mayoría cafetero, tiene suelos agroforestales (no arables) y para la conservación ambiental, área que en la realidad está reducida a tan solo el 31,8%.
Este anuncio fue hecho hoy por el IGAC en la conmemoración del Día Mundial del Suelo, fecha que fue celebrada por la entidad en un evento simultaneo en los 21 departamentos con los suelos más afectados por la sobrecarga agropecuaria.
El Director General del IGAC, Juan Antonio Nieto Escalante, enfatizó que Colombia aún no ha dimensionado la urgente necesidad de proteger y hacer un uso adecuado del suelo.
“A pesar de ser un territorio con una gran diversidad de suelos, hemos desaprovechado nuestro potencial agrícola, extralimitado la ganadería y afectado los ecosistemas estratégicos. Esto se debe a que no hacemos un uso de la información, la cual indica detalladamente las zonas aptas para usos agrícolas, pecuarios, forestales y de protección”.
El funcionario puntualizó que en los nuevos aires de paz que ya se respiran en Colombia, la información del IGAC se convierte en un insumo de primera mano para poner en marcha lo contemplado en la reforma rural integral del Acuerdo de Paz, la cual incluye aspectos como el acceso y uso de las tierras improductivas, la formalización de la propiedad, la frontera agrícola y la protección de zonas de reserva.
“Los suelos serán la base fundamental para el nuevo ordenamiento integral del país, y para alcanzar la tan anhelada paz, una razón de más para que empecemos a protegerlos”.
Otros hallazgos
El IGAC reveló que Caldas es el quinto departamento del país con mayor porcentaje de su área con conflictos de uso del suelo, superado solo por Sucre, Atlántico, Magdalena y Cesar.
El 62,6% de sus suelos presenta un uso inadecuado: 54,4% por sobreutilización y 8,2% por subutilización. Entre tanto, solo el 35,5% respeta la verdadera vocación y capacidad del suelo.
El territorio cuenta con estudios semidetallados en el 21,8% de su área, un factor que impide que su ordenamiento productivo y ambiental se realice de manera acorde a las características de sus suelos.
Recuadro: la inadecuada realidad
Uso que se le debe dar | Uso actual | |
Tierras arables (uso agropecuario) | 17,7% (131.240 hectáreas) | 65,7% (488.077 hectáreas) |
Tierras no arables (agroforestales) y para conservación y protección | 80,8% (600.153 hectáreas) | 31,8% (235.599 hectáreas) |