
El estudio de este predio de la Universidad Nacional de Colombia, que cuenta con 95,4 hectáreas, contribuye al conocimiento de los suelos del departamento de Cundinamarca y sirve de insumo para proyectar las decisiones de uso, manejo y conservación del altiplano cundiboyacense.
Desde 2012, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y la facultad de ciencias agrarias de la Universidad Nacional, se dieron a la tarea de evaluar y estudiar minuciosamente los suelos del Centro Agropecuario Marengo, un predio que hace parte del corredor tecnológico del municipio de Mosquera, en donde se desarrollan tareas de investigación científica y técnica.
Luego de más de dos años de estudios bajo “la lupa”, este viernes 5 de diciembre el director general del IGAC Juan Antonio Nieto Escalante, le hará entrega a la Universidad Nacional de este estudio semidetallado a una escala 1:2.500, lo que lo convierte en el primero en el país con un nivel de detalle tan específico.
Según Nieto Escalante, este estudio “ultradetallado” permite conocer mucho mejor la calidad y las características de los suelos del departamento de Cundinamarca, específicamente del corredor tecnológico conformado por la Universidad Nacional, el SENA y Corpoica en el municipio de Mosquera.
“Además, este análisis se convierte en un insumo que permite apoyar y favorecer el desarrollo del sector productivo y agropecuario de la región, y proyectar las decisiones de uso, manejo y conservación más adecuadas en la zona conformada por el altiplano cundiboyacense. Este estudio sirve como base para la planificación agrícola y pecuaria del centro del país, y una fuente de datos importantes para científicos, académicos, profesionales, estudiantes, agricultores, planificadores y comunidad en general”, apuntó el director del IGAC.
Marengo en cifras
Este libro presenta la distribución de los suelos de Marengo, identificando en cada lote las relaciones de las clases de suelos delimitados y caracterizados científicamente. Describe sencillamente el origen de los suelos, geoformas, condiciones climáticas, génesis y distribución del paisaje.
De las 95,4 hectáreas de Marengo, el IGAC mapeó las zonas donde se desarrollan actividades agrícolas y de producción, que abracan 79,5 hectáreas; las restantes son áreas construidas y pantanosas.
El IGAC definió 17 tipos de utilización de la tierra, en donde predominan los cultivos de avena forrajera, papa, cebolla cabezona, maíz y quinua, además del kikuyo y pastos raigrás.
Las principales limitaciones en Marengo son la disponibilidad de oxígeno en el suelo, penetrabilidad de raíces, altos contenidos de sales y sodio, y la compactación.
Este predio cuenta con resistencia a la penetración, salinidad, sodicidad y drenaje. Los materiales parentales de los suelos son en su mayoría depósitos aluviales finos o medios; en algunos sectores están sobre cenizas volcánicas.
Marengo tiene 15 unidades cartográficas de suelos, con fases como inceptisoles, molisoles y andisoles. 62 hectáreas están situadas en planos de terraza, con pendientes ligeramente planas entre el 1 y el 3 por ciento, y 18 hectáreas en áreas de cubeta (plano-cóncavas) con pendientes inferiores al 1 por ciento.
En cuanto al uso de la tierra, la actividad albera en su mayoría cultivos de arveja, quinua, apio y ajo, mientras que en la pecuaria predomina el ganado ovino y vacuno y los cultivos de pastos.
El clima ambiental es frío seco, con una temperatura promedio anual de 12,7 °C. La precipitación promedio por año es de 1.124 mm; sin embargo, se han registrado incrementos en precipitación en los últimos 6 años, siendo el 2011 el de mayor valor (2.260 mm).
“Este documento sirve como modelo para desarrollar estudios de nivel ultradetallados de este género en el país. Actualmente, todo el país cuenta con estudios agrológicos generales a escala 1:100.000, mientras que el 10 por ciento del territorio posee estudios semidetallados y detallados (1:25.000 y 1:10.000). Para este cuatrienio, una de nuestras metas es generar estudios semidetallados en las áreas productivas del país, lo que permitirá conocer mucho mejor las capacidades y limitantes de nuestros suelos”, puntualizó Nieto Escalante.
Jefe de Prensa y Comunicaciones