
Este insumo servirá como base para actualizar los Planes de Manejo y Ordenación de Cuencas Hidrográficas (POMCA). Hasta el 17 de mayo, expertos del IGAC realizarán los primeros muestreos de suelos en Pacho, Guaduas, Útica, Villeta y Vianí, municipios que hacen parte de la cuenca del río Negro.
Con una inversión cercana a los $5,2 mil millones, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) suscribieron un convenio para adelantar un estudio semidetallado de suelos en las cuencas hidrográficas de los ríos Negro y Sumapaz.
Para esto, expertos del IGAC analizarán minuciosamente un total de 762.911 hectáreas de ambas cuencas, que hacen parte de la vertiente del Medio Magdalena, y que están distribuidas en 52 municipios de los departamentos de Cundinamarca (45 territorios), Tolima (4) y Boyacá (3).
Según Juan Antonio Nieto Escalante, Director General del IGAC, este trabajo permitirá identificar la distribución, características, limitaciones y clasificaciones de los suelos; conocer la geomorfología, geología, clima y coberturas vegetales; y establecer la capacidad de uso y vocación de las tierras.
“Con esta información técnica, la CAR podrá actualizar los Planes de Manejo y Ordenación de Cuencas Hidrográficas (POMCA) de ambos ríos, un instrumento fundamental para la toma decisiones sostenibles en el territorio. Resultados como la vocación, capacidad, potencialidades y limitantes de los suelos, le permitirán a la Corporación cumplir con las obligaciones impuestas por el ordenamiento nacional en pro del desarrollo sostenible de los recursos naturales”, apuntó el Director.
Nieto Escalante afirmó que el estudio de suelos arrojará resultados para realizar el diagnóstico de las cuencas de los ríos Sumapaz y Negro, el cual contempla una caracterización del componente biofísico, un análisis situacional y la síntesis ambiental del territorio. “Esta información es necesaria para realizar la zonificación ambiental, un determinante fundamental para el ordenamiento territorial”.
En la cuenca del río Negro, el IGAC se concentrará en 456.907 hectáreas de 32 municipios: 3 en Boyacá (Otanche, Puerto Boyacá y Quípama) y 29 en Cundinamarca (Albán, Anolaima, Bituima, Caparrapí, El Peñón, El Rosal, Facatativá, Guaduas, Guayabal de Síquima, La Palma, La Peña, La Vega, Nimaima, Nocaima, Pacho, Puerto Salgar, Quebradanegra, San Francisco, Sasaima, Subachoque, Supatá, Topaipí, Útica, Vergara, Vianí, Villagómez, Villeta, Yacopí y Zipaquirá.
De este listado, los que más serán estudiados son Caparrapí, La Palma, La Vega, Vergara, Villeta, El Peñón, Supatá, La Peña, Útica, Quebradanegra, Nocaimam Vianí y Guayabal de Síquima.
Por su parte, en la cuenca del Sumapaz el área a estudiar es de 306.004 hectáreas, distribuidas en 20 municipios: 4 del Tolima (Carmen de Apicalá, Icononzo, Melgar y Suárez) y 16 de Cundinamarca (Agua de Dios, Arbeláez, Bogotá, Cabrera, Fusagasugá, Granada, Nilo, Pandi, Ricaurte, Pasca, San Bernardo, Sibaté, Silvania, Soacha, Tibacuy y Venecia).
Los de mayor cantidad de área a analizar Nilo, Fusagasugá, Venecia y Pandi.
Primeros muestreos
17 servidores del IGAC ya se encuentran en Pacho, Guaduas, Útica, Villeta y Vianí, municipios que hacen parte de la cuenca del río Negro, adelantando la primera fase de campo del estudio semidetallado de suelos, un trabajo que irá hasta el próximo 17 de mayo.
“Todo el trabajo de campo en ambas cuencas irá hacia mediados de septiembre. Hemos tenido algunos inconvenientes por la fuerte temporada invernal que atraviesa el país, ya que la lluvia no solo impide tomar las muestras de suelos en terreno, sino que pone en peligro la vida de los expertos, ya que se pueden generar derrumbes y remociones en masa”, apuntó Germán Darío Álvarez, Subdirector de Agrología del IGAC.